17 Abr Laporta provoca su propio incendio sin tener en cuenta las repercusiones aún más negativas para la reputación de la marca Barça
Durante la mañana de hoy, el presidente del Fútbol Club Barcelona, Joan Laporta, ofreció una rueda de prensa en la que abordó varios temas de
actualidad relacionados con el club. Sin embargo, la repercusión de dicha rueda de prensa y algunas de sus afirmaciones han generado una reacción
masiva en la mayoría de los medios de comunicación, quienes destacan que Laporta ha dado pocas explicaciones, datos erróneos y ha tenido un discurso
populista, proclamándose como víctima y contraatacando en todos los frentes.
Sus ataques han provocado un nuevo incendio de consecuencias imprevisibles. Las respuestas y repercusiones negativas de sus declaraciones las
conoceremos a partir de las próximas horas y durante los próximos días, pero lo que está claro es que Laporta ha querido defenderse, inventando
enemigos y culpables, y atacando diferentes frentes sin tener en cuenta que seguramente las reacciones y respuestas a partir de este momento
puedan golpear aún más fuerte la reputación del club y la propia marca Barça.
En su rueda de prensa, Joan Laporta se defendió de las acusaciones que pesan sobre el club en relación con el llamado “Barçagate”. Laporta llevó
consigo una serie de carpetas con documentación que, según él, prueban la limpieza de la institución y refutan las acusaciones que se han hecho contra
ella. El presidente del Barcelona comenzó su discurso reivindicando la honorabilidad del club y denunciando una campaña de desprestigio en su contra.
Según Laporta, el Barcelona está en un buen momento deportivo, y esta situación no es del agrado de algunos que intentan atacar la imagen del club.
Laporta también hizo referencia a la figura de Javier Tebas, presidente de LaLiga, a quien criticó duramente por su actitud en relación con el caso del
Barcelona. Laporta acusó a Tebas de hipocresía y falta de profesionalidad, y afirmó que el presidente de LaLiga ha participado en un linchamiento
público del Barcelona sin que se hayan presentado pruebas concluyentes contra el club. Curiosamente, Laporta utilizó el término “El bombero pirómano”
para definir la actitud de LaLiga sobre el caso Negreira. Sin embargo, parece que en sus declaraciones, Laporta ha decidido provocar su propio
incendio.
Laporta pidió comprensión y clemencia, pero llegó para intentar desprestigiar a los demás
Laporta ha podido comprobar en carne propia los efectos devastadores de la reputación negativa sobre la marca Barca, pero nada de ello ha servido para
evitar referirse al Real Madrid, señalando el estado de su actual relación institucional y afirmando a su vez que el Real Madrid ha sido favorecido en
el pasado por las decisiones arbitrales.
Por último, Laporta habló de las demandas que el club ha presentado contra periodistas y de las facturas de Negreira. En este punto, Laporta aseguró
que el Barcelona está intentando hacer justicia contra personas que están perjudicando la imagen del club y que las facturas que se han presentado como
prueba del “Barçagate” han sido auditadas y acreditadas por empresas como KPMG. Pero claro, el riesgo es que es un Juez el que debe determinar si
dichas pruebas son válidas y si los pagos y acuerdos con Negreira tenían o no alguna otra finalidad encubierta.
Contraatacar no es siempre la mejor estrategia
Contraatacar para defenderse buscando la culpa en terceros no es necesariamente es una buena estrategia para defenderse de acusaciones, ya que podría
dar lugar a nuevas acusaciones o incluso a una investigación más profunda sobre las acciones de la persona que está contraatacando. Además, la
estrategia de contraatacar puede no ser efectiva en términos de persuadir a los demás de la inocencia de la persona acusada. En lugar de eso, puede ser
más efectivo proporcionar evidencia sólida y razonamiento coherente para demostrar la inocencia. Sin embargo, si la justicia encuentra
culpable al equipo azulgrana, la lápida de su tumba será aún más pesada.
Si una institución deportiva ataca o acusa a los periodistas y medios, puede haber varias respuestas posibles, dependiendo de la naturaleza y el
alcance de las acusaciones. Evidentemente, lo más obvio es enfrentarse a una mayor crítica y una nueva réplica. Los medios pueden responder
públicamente a las acusaciones, defendiendo su posición y proporcionando pruebas o evidencia para refutar las afirmaciones de la institución deportiva.
Esto significa que la reputación de la marca del Fútbol Club Barcelona podría verse aún más afectada. De hecho, las primeras
respuestas no se han hecho esperar y algunos diarios deportivos ya recogen
las reacciones de la prensa a nivel mundial: “violencia” contra el Madrid y “victimización”. La marca Barca vuelve a ser el centro de atención de
las polémicas con reacciones e impactos negativos sin cesar que empiezan a tocar el fondo de sus cimientos. Y ese, no es el camino.
Claramente podemos llegar a la conclusión de que las declaraciones del presidente del Fútbol Club Barcelona, Joan Laporta, no han sido demasiado
acertadas y podrían tener de nuevo, una cadena de respuestas y reacciones negativas hacia la propia marca Barça. Laporta ha utilizado un
discurso populista y ha atacado a diferentes frentes sin tener en cuenta las posibles repercusiones negativas que sus palabras podrían tener
en la reputación del club. Además, ha decidido provocar su propio incendio al hacer referencia al Real Madrid y criticar duramente al presidente de
LaLiga. Por último, el hecho de que las pruebas presentadas por el club en relación con el “Barçagate” deban ser validadas por un juez también puede
dañar la imagen de la marca Barça.